Consejos para proteger nuestra casa de ladrones (II)

En este segundo artículo de nuestra serie Consejos para proteger nuestras casa de ladrones, analizamos otras medidas de seguridad y disuasión para nuestros hogares que tienen una base electrónica y evitar así la entrada de extraños en las casas. Los sistema de seguridad electrónica más habituales para proteger nuestra casa de ladrones son: instalar una alarma y/o situar cámaras de vigilancia CCTV.

Si las medidas mecánicas son de gran utilidad para dificultar el acceso, estas medidas son el perfecto complemento para provocar la huída de los ladrones y en caso contrario, de generar que el allanamiento dure mucho menos o incluso deje pruebas que puedan facilitar la captura de los extraños.

Alarmas y CCTV: el aviso de la seguridad electrónica

El número de los hogares que cuentan con sistema de seguridad electrónica crece poco a poco. Estos sistemas tienen un coste reducido y tienen un importante valor como disuasión y de aviso ante entradas de extraños. Es importante colocar los elementos del sistema de alarma de la forma más adecuada, según la distribución de las habitaciones y las costumbres de los habitantes de la casa.

Existen alarmas que permiten un armado selectivo de cada estancia de manera independiente, proporcionando un extra de seguridad cuando los usuarios están en la casa. Es especialmente interesante en grandes casas.

Sin embargo, la necesidad de ir gestionando el sistema a medida que queramos movernos por nuestras dependencias hace que todavía no sea un sistema muy extendido, decantándose erróneamente por su activación solo en nuestra ausencia.

Entre los componentes estándar de una alarma, encontramos:

Los teclados son el elemento de comunicación para activar y desactivar el sistema. Se suelen colocar en la zona de acceso y suelen funcionar con un retardo suficiente para que el usuario tenga tiempo de desactivar el sistema. Es recomendable contar con un código de coacción, ya que en caso de que se vea obligado a desactivar el sistema, la empresa de seguridad podrá actuar sin que los ladrones se percaten.
La central del control es la que recibe y procesa las señales, y pone en marcha el aviso de alarma que llega a la Central Receptora de Alarmas. Se suele colocar en lugares discretos, con conexión eléctrica y telefónica y batería.
Los detectores, sensores de movimiento a infrarrojos y/o microondas, deben estar bien ubicados para cubrir correctamente todas las zonas del inmueble. Estos equipos electrónicos captan las anomalías de movimiento, rotura de cristales e incluso algunos llevan cámara incorporada.

Consejos en la instalación de una alarma

El mantenimiento del sistema de alarma es tan importante como su correcto diseño, ya que el sistema de alarma tiene sentido si cuando llega la oportunidad funciona de manera correcta. Requiere al menos una revisión anual, que compruebe su funcionamiento y conexión a la CRA.
Como en todos los sistemas codificados, desaconsejamos la introducción de contraseñas sencillas. Hacer un pequeño esfuerzo memorístico hará que nuestro sistema sea seguro.
Su implantación debe ser realizada siempre por un equipo experto, que pueda reconocer el edificio o la vivienda durante unos minutos para detectar la mejor ubicación y la zona más vulnerable del sistema.
Este equipo asesor elegirá el mejor sistema para su hogar, ya que una misma alarma no tiene por qué ser la más adecuada para todas las viviendas. Especificaciones adicionales o funciones especiales personalizan el sistema en función a las características de nuestra vivienda y ajustan el sistema a nuestras necesidades. Además, propone un desafío más a los ladrones, ya que cuanto más extendida está una alarma, más conocida es por los delincuentes, al igual que sus puntos más débiles.
Las centrales de control de alarma tienen un sistema bidireccional, es decir, que emiten señales a la empresa que gestiona la seguridad, pero además, un operario puede verificar desde la CRA su correcto funcionamiento.
Existen sistemas con los que el propio usuario puede controlar la central a través del móvil, lo que aporta un extra de tranquilidad al usuario, al poder activar el sistema de forma remota, y permitir accesos controlados.

Consejos para la instalación de cámaras de seguridad CCTV

La mayor parte de los consejos para la instalación de una alarma son totalmente válidos para la instalación de Circuito Cerrado de TV (CCTV), aunque en relación a estos sistemas, debemos comentar como elementos específicos:

Una cámara siempre deberá controlar el acceso principal a nuestra vivienda, y otra por cada acceso extra. Si además contamos con acceso de vehículos, también es recomendable la instalación de otra cámara en este lugar.
La instalación de nuestras cámaras siempre tendrá una altura mínima en función del elemento a vigilar. Para controlar el acceso de coche la altura mínima se encuentra en unos 3 metros, que puede ser incrementada hasta los 6 metros dependiendo del flujo y tipo de vehículos.
Es interesante la instalación de cámaras infrarrojas que permitan la visión nocturna, ya que aportarán pruebas del acceso durante la noche, el momento más propicio para los ladrones. Además, las lentes deben tener un alcance focal adaptado a nuestras necesidades.
Los sistemas motorizados permiten el movimiento remoto desde otro dispositivo como otro ordenador o teléfono móvil, permitiendo la eliminación de puntos ciegos y añadiendo un extra de control que significa mayor tranquilidad.
A la hora de instalar las cámaras, una prioridad siempre debería ser la de maximizar su visibilidad por parte de los posibles ladrones. Por eso, sus colores suelen ser claros. En la práctica significa un factor extra de disuasión.