¿Qué son las sobretensiones eléctricas y cómo evitarlas?
Si existe un problema recurrente e imprevisto que puede afectar a cualquier red eléctrica ese son las sobretensiones. A pesar de que todas las instalaciones cuentan con elementos de seguridad para evitar la aparición de fallos y anomalías, es muy difícil controlar el aumento inesperado de voltaje en las viviendas. Hoy contamos qué son las sobretensiones eléctricas y cómo podemos evitarlas.
Este crecimiento eléctrico, por encima de los valores establecidos, puede llegar a ocasionar graves problemas, no solo en la instalación en general, sino también a todos los equipos eléctricos conectados a ella.
Los picos de tensión repentinos se pueden dar en cualquier comunidad o vivienda pero, a pesar de que su duración es mínima (apenas unos microsegundos), este crecimiento eléctrico por encima de los valores establecidos puede llegar a ocasionar graves problemas, no solo en la instalación en general, sino también a todos los equipos eléctricos conectados a ella.
Tipos de instalación eléctrica
Dentro de los tipos de sobretensión eléctrica podemos distinguir dos principales:
Sobretensiones permanentes o mantenidas
Estas se producen cuando el aumento de tensión dura más de unos microsegundos y se mantiene más en el tiempo. Este tipo de sobretensión puede ocasionar daños importantes en la instalación eléctrica, y en los equipos conectados a ella. Suelen ser habituales cuando la instalación eléctrica ya está obsoleta, o cuando hay fallos de conexión en los centros de distribución.
Sobretensiones transitorias
Como su nombre indica, la duración en el tiempo de este crecimiento de voltaje entre tierra y conductor es momentáneo.
Este tipo suele darse cuando hay pequeños problemas en la red general. En la mayoría de los casos tiene lugar por fenómenos climatológicos adversos, como por ejemplo, la presencia de tormentas eléctricas.
¿Cómo me protejo de las sobretensiones?
Si queremos proteger nuestros equipos para que no sufran ningún daño, podemos instalar limitadores de tensión acordes a nuestras instalaciones. La protección de las mismas dependerá del tipo de limitador que instalemos y la carga tensional que pueda soportar.
Este dispositivo tiene una tolerancia. De este modo, permite una subida de tensión moderada, pero si pasa de ese margen, salta para proteger el interior de la vivienda y así evitar que se estropeen los aparatos eléctricos conectados a la línea.
La mejor manera de proteger tu hogar frente a las sobretensiones es instalar limitadores de sobretensiones o DPS, dispositivos que se colocan en los cuadros eléctricos. Lo más recomendable es que se instale por capas, estando coordinados los DPS del servicio eléctrico con los de los componentes electrónicos.
Es importante tener en cuenta que no todos los limitadores de sobretensiones son iguales. Existen tres tipos principales de protectores contras las sobretensiones de tu hogar: los transitorios, los permanentes y los combinados.
También podemos encontrar protectores monofásicos y trifásicos. Los primeros son los más indicados para los hogares que tengan una potencia de entre los 210 y 240 voltios y corriente alterna.
Por otro lado, los trifásicos se suelen instalar más para inmuebles de uso profesional y con más gasto energético, y no tanto para los hogares particulares. Esto se debe a que se suelen colocar cuando el voltaje de la instalación excede los 380 voltios, teniendo tres fases y tres corrientes alternas.
¿Es obligatorio instalar protectores de sobretensiones?
En la actualidad es obligatorio tener instalado un limitador de sobretensiones en cualquier instalación eléctrica. De hecho, se recomienda que este protector sea el primer elemento que se instale en el cuadro eléctrico de un inmueble.
Por lo tanto, debemos tener en cuenta la importancia de revisar y adaptar la protección de las instalaciones eléctricas de nuestras comunidades para evitar este tipo de incidente que puede generar una pérdida de tiempo y dinero por la sustitución de los equipos afectados.
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