Las cinco dudas recurrentes a la hora de instalar un videoportero

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La instalación de videoporteros en viviendas unifamiliares y comunidades de vecinos a menudo genera inquietudes. Estas preguntas frecuentes abarcan temas que van desde la elección del sistema adecuado hasta aspectos técnicos, costos y funciones de seguridad, con el fin de proporcionar información valiosa para quienes buscan mejorar la seguridad y la comunicación en su comunidad mediante un videoportero. En este artículo exploraremos las cinco dudas más recurrentes a la hora de instalar un videoportero.

La elección de un sistema adecuado es una decisión importante que conlleva diversas dudas, tanto para propietarios de la comunidad de vecinos como para administradores de fincas.

Para ello, es esencial comprender los aspectos clave antes de embarcarse en el proceso y contar con técnicos especializados para la instalación del mismo. De este modo, nos aseguramos de tener respuestas y una orientación clara en cada paso del proceso.

En un mercado repleto de opciones, una de las principales inquietudes es la elección del sistema adecuado. Existe una amplia gama de modelos en los que no es solo importante elegir el que mejor se adapte a la estética de la comunidad, sino también el nivel de seguridad y privacidad que puede ofrecer el sistema elegido.

Dudas más comunes a la hora de instalar un videoportero

Antes de la instalación de un videoportero, con independencia de cual sea el modelo o la marca, se debe tener en cuenta algunos factores que determinarán una correcta elección e instalación.

A continuación, se abordarán diversas preguntas recurrentes relacionadas con la seguridad y funcionalidad del sistema.

1.      ¿Qué tipos de tecnología de videoporteros se deben escoger para la instalación?

Cuando se enfrenta a la instalación de un videoportero, es crucial comprender las opciones tecnológicas disponibles en el mercado. En la actualidad existen tres categorías principales de sistemas de videoportero, cada uno con sus propias características y ventajas:

Sistemas tradicionales

En primer lugar, encontramos los sistemas tradicionales, que se dividen en dos subcategorías: el analógico y la tecnología VDS.

El analógico, con sus 4 hilos comunes para toda la instalación, es ideal para proyectos pequeños de audio. Por otro lado, la tecnología digital VDS ofrece un rendimiento óptimo para instalaciones de tamaño reducido o mediano, requiriendo tan solo 3 hilos adicionales de cable coaxial. Tienden a desaparecer por que ya han sido superados por las siguientes opciones.

Sistemas de video portero en 2 hilos no polarizados

Una alternativa muy eficiente es la utilización de sistemas de video portero en 2 hilos no polarizados. Estos sistemas digitales permiten una instalación más rápida y precisa, utilizando la infraestructura de cableado existente.

Esto los convierte en una opción flexible y versátil, adecuada tanto para nuevas construcciones como para la renovación de edificios y viviendas.

Sistemas IP (TCP/IP)

Finalmente, los sistemas IP representan una innovación tecnológica de vanguardia al permitir la comunicación a través de una infraestructura de red.

Estos sistemas, basados en tecnología digital, emplean un cableado similar al de una red Ethernet, lo que los hace ideales para proyectos de gran envergadura o para instalaciones más pequeñas con requisitos de conectividad e integración excepcionales.

2.      ¿Con cable o inalámbrico?

Cuando se enfrenta a la decisión de instalar un videoportero en su comunidad, es fundamental evaluar si prefieres un sistema con cable o inalámbrico. Con determinadas tecnologías, una mala elección de cable puede causar múltiples complicaciones en la instalación.

La selección del producto adecuado estará marcada según el tipo de cableado disponible en la instalación o si es posible sustituirlo por uno nuevo. A pesar de que ambas opciones tienen sus ventajas, existen una serie de aspectos claves que son muy útiles a la hora de tomar una decisión.

Videoportero con Cable

Los videoporteros con cable están conectados a través de cables físicos, lo que garantiza una conexión estable y de alta calidad. Es importante tener en cuenta que la instalación de cables puede ser algo más compleja y costosa, especialmente si no existen preinstalaciones de cableado o deben ser cambiadas en su comunidad. Además, las reparaciones o modificaciones futuras pueden requerir trabajo adicional en los cables. Sigue siendo la opción prioritaria para comunidades.

 Videoportero Inalámbrico

Los sistemas inalámbricos pueden verse afectados por interferencias o problemas de señal, lo que puede resultar en una calidad de audio o video inferior en comparación con los sistemas con cable. Además, la necesidad de baterías o fuentes de alimentación adicionales puede requerir un mantenimiento más regular.

La elección entre un videoportero con cable o inalámbrico dependerá de las necesidades específicas de su comunidad, su presupuesto, sus preferencias en términos de calidad y facilidad de instalación. Es esencial evaluar cuidadosamente estas consideraciones antes de tomar una decisión.

 

3.      ¿A qué altura debe estar la placa de calle?

Uno de los temas que más preocupa a los propietarios de las viviendas o a los administradores de fincas es el nivel de accesibilidad tras la instalación del videoportero. La normativa establece requisitos específicos en relación con la altura y la accesibilidad de los videoporteros en las comunidades de vecinos.

La normativa exige que estos sistemas sean accesibles para adaptarse a las diversas necesidades de los propietarios. Un panel de control de videoportero colocado a una altura superior a 140 cm puede ser conveniente para los adultos, pero no resultaría accesible para niños o personas con movilidad reducida, como aquellas que utilizan sillas de ruedas.

Con las nuevas normas de accesibilidad, el equipo debe situar entre 90 y 120 cm del suelo para facilitar un acceso universal, como puede verse en este compendio de normas de accesibilidad.

Más allá de su comodidad de uso, es esencial garantizar que estos dispositivos sean adecuados para todos los propietarios en condiciones normales de funcionamiento. Para garantizar la accesibilidad universal, en casos necesarios, se puede optar por la instalación de un sistema de videoportero a dos alturas diferentes en la entrada de la comunidad, asegurando así que todos los vecinos puedan utilizarlo sin dificultad o poner un más bajo y único.

4.      ¿Qué otras funciones pueden incluir mi videoportero?

Cada proyecto presenta requisitos específicos, y las preferencias del usuario pueden variar en cuanto a las funcionalidades necesarias. Entre las más solicitadas, destaca la posibilidad de contar con múltiples placas de calle, así como la incorporación de un sistema de control de accesos que permita la entrada al edificio sin necesidad de llave.

Dentro de las características más populares, también se encuentra la capacidad de abrir una segunda puerta, ya sea para peatones o para acceso al garaje.

Muchos usuarios buscan también funciones que añaden un nivel extra de seguridad, como la captura de imágenes o la integración con dispositivos de videovigilancia, como cámaras de circuito cerrado, son altamente valoradas.

5.      ¿Los videoporteros necesitan mantenimiento?

Sí, los videoporteros requieren mantenimiento periódico para garantizar su funcionamiento óptimo y prolongar su vida útil.

En términos de conservación, se aconseja evitar el uso de agentes de limpieza abrasivos y, en su lugar, emplear un paño suave con agua jabonosa, lo cual suele ser suficiente.

No obstante, si el dispositivo experimenta problemas electrónicos o muestra señales de deterioro en los cables, se recomienda encarecidamente que se contacte a un instalador profesional, ya que esto ayudará a prevenir cortocircuitos y garantizar un servicio continuo y sin complicaciones.

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